Como les gusta a los medios de comunicación de este país sacar morbo de noticias relacionadas con dramas sociales.
Opinión, por Miguel Ángel Martin Ibañez | domingo, 16 de enro de 2022
Como les gusta a los medios de comunicación de este país sacar morbo de noticias relacionadas con dramas sociales.
Y sin hablar de la noticia, sabréis que estoy diciendo.
Desde hace más de una década CC. OO, U.G.T. y los partidos de izquierdas de la Asamblea de Madrid llevamos denunciando las deficiencias tan importantes que está sufriendo la red de acogimiento residencial de atención a la infancia de la CAM. Esto parece que para algunos es nuevo porque ha visto en las noticias un drama social que puede llegar a tener relación, aunque de forma indirecta y lejana, con el acogimiento residencial. Pues bien, tanto los agentes sociales como los partidos progresistas, no sólo hemos realizado denuncias sobre el sistema sino también propuestas tanto del acogimiento residencial como del familiar, que, como no podía ser de otra manera, tiró a la papelera el gobierno regional. Un claro ejemplo lo tenemos en el monográfico sobre atención al a Infancia que expuso nuestro compañero Ángel Gabilondo en el 2018 en la Asamblea de Madrid, o en la propuesta sobre Acogimiento Familiar que puso sobre la mesa ya hace más de 4 años un compañero de CC. OO de Centros de Protección.
Ya se nos ha olvidado lo que pasó en el Centro de Primera Acogida Hortaleza que duró años en el tiempo. De esto no hace más de tres, y que concluyo por la existencia de una pandemia y no por la gestión de la derecha madrileña. Aquí sí que fueron ellos los auténticos responsables de la situación. Una situación de auténtico maltrato tanto a profesionales como a menores. Después de lo que los compañeros y compañeras de este centro me contaban, me creo cualquier cosa de la gestión de la infancia en esta Comunidad, independientemente de casos aislados que puedan tender a confundirnos.
Por activa y por pasiva hemos pedido un auténtico Plan Integral de Atención a la Infancia, y nos contestaron con un panfleto que más parecía de una agencia de viajes que cualquier otra cosa, y que por cierto ya está finiquitado en el tiempo. Igual pasa con la nueva ley de infancia y adolescencia de la CAM, y que aún sigue en el tintero. Aún seguimos con una del año 95.
Y así suma y sigue, por eso os digo que, aunque se acabe el mundo yo seguiré R que R y como dijo el gran Bob: “No descansare ni un solo día”.