El Arrabal de Chamberí se unió a Madrid en la segunda mitad del siglo XIX al derribarse la llamada cerca y las tapias de los Pozos de la Nieve, lo que convertiría la antigua carretera de Francia en la prolongación de la calle Fuencarral, dando vida a la Glorieta de Quevedo y al antiguo Paseo de La Habana, ahora calle Eloy Gonzalo.

Por Real Orden del 5 de enero 1865 y apoyada por una instancia con mas de 60.000 firmas, se obtuvo la autorización para la creación de una Clínica Homeopática destinada a ser acogidos y curados adecuadamente los pobres en Madrid.

Encontraron un solar en el Ensanche del Norte de la Capital proyectado por Carlos María de Castro, y siendo edificado en terrenos del Marqués del Socorro, el Hospitalillo de Chamberí fue durante muchos años el único edificio en una zona casi despoblada y ocupada por desmontes, con grandes manzanas sin construir, pasando con el tiempo a ser un entorno donde se edificaron bellos edificios con jardines en el frente y convertirse en la extensión de uno de los barrios mas populares y castizos de la Capital, siendo el Instituto Homeopático y Hospital de San José una de sus joyas arquitectónicas.

Continuara …

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