Ayuso no puede aceptar una imposición de la ultraderecha que supone un recorte de la libertad de expresión y del derecho de los madrileños y de las madrileñas a estar informados a través de un medio público que les proporciona información sobre la actualidad regional y, por tanto cercana. El ente Telemadrid es un servicio público que garantiza este derecho de la ciudadanía de Madrid.
Ya sabemos de la vocación trumpista y populista de Vox, que defiende la demolición de las instituciones democráticas con propuestas que recortan los derechos de la ciudadanía, como lo es el cierre de Telemadrid. Exigimos a Ayuso que no ceda a estas pretensiones de sus socios porque nos estamos jugando algo tan importante como libertades y derechos que están recogidos en la Constitución, como es el derecho a la información.
No todo vale, señora Ayuso.
Desde el Partido Socialista de Madrid conminamos a Ayuso a que se pronuncie claramente sobre la exigencia de Vox en relación con la desaparición de Telemadrid.
Los y las socialistas de Madrid apoyamos el trabajo y la profesionalidad de la plantilla del ente público. Defendemos su vocación de servicio público y reivindicamos que se garantice su trabajo en libertad y sin presiones de ningún tipo.
No entendemos los ataques que está recibiendo el ente público, que ha crecido en los últimos 12 meses a un ritmo de un 6% y que ha obtenido su mejor dato de audiencia en los últimos años y denunciamos el asalto a Telemadrid que prepara la presidenta regional para convertirla en su teleayuso.
Ahora que Telemadrid ha recuperado su credibilidad, gracias al buen trabajo de sus profesionales, no entendemos ni aceptaremos los ataques de la ultraderecha y las injerencias de Ayuso.
Hoy, Ayuso ha tomado posesión y Telemadrid ha sido castigada: la retransmisión se ha adjudicado, por primera vez en la historia de la región, a una productora privada. Es un síntoma más de la deriva autoritaria de la presidenta madrileña.