Alfredo Pérez Rubalcaba nos dejó inesperadamente hace ya dos años. Un infarto cerebral nos apartó de él un 10 de mayo de 2019. Tenía 67 años y su figura política era de tal envergadura que más de 4.000 personas formaron largas colas para despedirse de él en la capilla ardiente instalada en el Congreso de los Diputados.
EL SOCIALISTA Nº 107 | domingo, 16 de mayo de 2021
Alfredo Pérez Rubalcaba nos dejó inesperadamente hace ya dos años. Un infarto cerebral nos apartó de él un 10 de mayo de 2019. Tenía 67 años y su figura política era de tal envergadura que más de 4.000 personas formaron largas colas para despedirse de él en la capilla ardiente instalada en el Congreso de los Diputados. Todas las muestras de afecto que recibió de todo el espectro político y la sociedad en su conjunto, dan fe de su extraordinaria dimensión política.
Un hombre de Estado al servicio de España
Nacido en Cantabria en 1951, se afilió al PSOE en 1974, aún en tiempos de la dictadura franquista. Con 35 años, en 1986, asumió la secretaría de Estado de Educación y en 1992 se convirtió en ministro de Educación y Ciencia, del gobierno de Felipe González. Con su trabajo se consiguió entre otros la universalización de la educación pública y la reforma del sistema educativo.
Con Rodríguez Zapatero fue nombrado ministro del Interior, vicepresidente del Gobierno y portavoz en el Congreso. Precisamente fue en este periodo en el que su talla histórica se consolidó, siendo actor necesario en el fin de la banda terrorista ETA. En 2012 fue elegido como secretario general del PSOE, cargo que desempeñó hasta 2014. Alejado desde entonces de la primera línea de la política, regresó a su trabajo como profesor de química orgánica en la Universidad Complutense de Madrid.
Rubalcaba fue un hombre de Estado con una enorme capacidad de trabajo y gran talento político, cuyas responsabilidades pusieron a prueba su grandeza y templanza. Se mostró siempre como un luchador por la libertad, y contribuyó a forjar un país moderno, europeo y democrático desde todos los cargos y responsabilidades que ocupó en su amplia carrera de servicio público.
¡Gracias Alfredo!
En la edición del 10 de mayo de 2019, El Socialista, ya en versión digital, publicó una edición especial «In memorian» para rendir homenaje al desaparecido Alfredo Pérez Rubalcaba. Dos artículos destacan en la publicación digital. Por un lado un breve y emocionado texto titulado «Gracias, Alfredo» en el que se puso de manifiesto el inmenso dolor con el que los socialistas y la sociedad española en general despidieron a una persona que «lo fue todo en el PSOE» y que demostró siempre una enorme fortaleza personal y política, dedicando su vida a trabajar por la democracia, la libertad y el fin de la violencia terrorista.
Tras un repaso por todos los cargos que ocupó en su larga trayectoria política, desde los gobiernos de Felipe González hasta su elección como secretario general del PSOE en 2012, el texto concluye con un emotivo «hasta siempre, Alfredo y gracias», y agradece su compromiso con la igualdad y la cohesión social, su vocación de servicio público y su altura como hombre de Estado.
El siguiente artículo que destaca en esta edición es el recuerdo que le dedicó el secretario general del PSOE y actual presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, en el diario El País. Una despedida difícil, de alguien que entregó lo mejor de su vida al partido y también a España, de una figura que transciende las siglas de cualquier formación y es parte ya de la memoria democrática de nuestro país».
Una vida, comentó Sánchez, que es la de un hombre que decidió «entregar su vida al servicio público y sacrificar muchas cosas» para construir un mundo mejor. Una persona que no dejó de crecer con el paso del tiempo «hasta hacer de él una figura que hoy despedimos con dolor, pero también con sincero y justo reconocimiento». Y termina mostrando su admiración, agradecimiento y orgullo.
Para consultar esta edición en homenaje a Alfredo Pérez Rubalcaba puede hacerlo en este vínculo. Para acceder a otras ediciones de El socialista puede hacerlo accediendo a la hemeroteca de la Fundación Pablo Iglesias.