Tribuna de Juan Francisco Serrano Martínez, Secretario para el Pacto de Toledo y la Inclusión Social
El Socialista | Nº 128 3 de diciembre de 2021
El Estado del bienestar de nuestro país se encontraba en una situación crítica tras los gobiernos del Partido Popular. Las pensiones era su siguiente víctima. La privatización sistemática de lo público a la que nos tienen acostumbrados el Partido Popular, ha resultado sumamente perjudicial para el futuro de España. Ejemplo de ello es el estado en el que dejaron el fondo de reserva de la seguridad social. Somos conscientes de que el siguiente paso era poner a la venta el derecho a una pensión digna, y que los jóvenes de hoy se resignaran a un futuro y una jubilación indigna.
Es imprescindible comprender el espíritu del sistema público de pensiones. Un sistema que funciona gracias a los esfuerzos generacionales. Pero la idiosincrasia de nuestra pirámide poblacional nos empuja a sobrecargar mañana a las generaciones más jóvenes de hoy. Este gobierno socialista no podía quedarse impasible sabiendo que nuestros jóvenes se dirigían hacia un futuro insostenible.
La valentía de llevar a cabo una reforma de las pensiones mediante la creación del Mecanismo de Equidad Intergeneracional ha demostrado la apuesta del gobierno por la sostenibilidad del sistema público de pensiones. Pero hay una cuestión que resulta importante señalar ¿Qué sucederá entonces con las pensiones de las generaciones más jóvenes? Esta reforma va a permitir dar certidumbre a las futuras generaciones. Las mismas generaciones que han venido sufriendo crisis tras crisis, a las que se les ha arrebatado la esperanza de tener certidumbre. Con este gobierno se les devuelve esa esperanza y certidumbre para que las generaciones más jóvenes puedan tener un futuro digno.
Sobre esta reforma debe de remarcarse que es un conjunto de medidas dinámicas, porque aplican una serie de mecanismos de acuerdo a las necesidades del sistema público de pensiones. Delimita de forma temporal las medidas a adoptar de acuerdo al reto demográfico de nuestro país. Hablamos también de que son medidas contingentes porque este mecanismo sólo se activará si la senda de gasto en pensiones de acuerdo al PIB, se desvía de la que ya estaba prevista; y además, el método de aplicación sería de forma secuencial. En resumen, podemos decir que es una reforma que aplica medidas flexibles y equilibradas. Si no resulta imprescindible no se aplicarán medidas, pero en caso de ponerse en riesgo la sostenibilidad de las pensiones del mañana se aplicará este mecanismo. Todo ello ya se venía indicando en las recomendaciones del Pacto de Toledo. Con estas medidas volvemos a reactivar el fondo de reserva de la Seguridad Social.
Los y las actuales pensionistas han desarrollado una vida laboral con mucho sacrificio para poder llegar a disfrutar hoy de una jubilación digna. Es por ello se blindan la subida de las pensiones. Porque el futuro del sistema público de pensiones no puede encontrarse en otra dirección que la de la sostenibilidad de nuestro sistema. Este gobierno defiende a los pensionistas de hoy y a los pensionistas del mañana. Y los defiende alcanzando acuerdos con los agentes sociales.
Debemos de sentirnos orgullosos de la generosidad intergeneracional de nuestro país así como de un gobierno que vela por nuestro presente y de nuestro futuro.